La observación y la comunicación son herramientas claves para descubrirlo. También podríamos pedirles que completen un pequeño cuestionario que nos servirá tanto a nosotros como a nuestros hijos para tener un mejor conocimiento personal:

Inventario de inteligencias múltiples

Como padres nos preguntamos cómo podemos educar a nuestros hijos a través de los valores, qué podemos hacer para lograrlo y cuándo es el mejor momento. Y es que desde pequeños, los niños están observando su alrededor y aprendiendo de sus padres. La principal herrmienta de aprendizaje es el ejemplo. El ejemplo que dan sus padres en su forma de relacionarse con los demás, de pedir las cosas, de compartir mesa, asiento, de cooperar, de ayudar a los demás, de defender, de reclamar, de tolerar y aceptar, juega un papel importante en la transmisión de esos valores.  Desde allí, ellos están aprendiendo a darle el valor a algunos comportamientos que les ayudará a convivir de mejor manera y a sentirse bien. Un niño que conoce el límite del otro, podrá vivir una vida sana y saludable, sea en su entorno familiar o escolar. Un niño que sabe respetar a los demás, será más fácilmente respetado, y así con todo.

Los valores son las reglas de conducta y actitudes según las cuales nos comportarnos y que están de acuerdo con aquello que consideramos correcto. Su función es orientar nuestra vida y dotarla de sentido. Al nacer, los niños no son ni buenos ni malos. Con la ayuda de sus padres, educadores y de los que conviven con ellos, aprenderán lo que está bien y lo que está mal decir, hacer, actuar, vivir.

Para educar a los niños en valores, ¿Qué podemos hacer?

• lo primero es conocer cada uno de los valores y trazar un plan que nos ayude a inculcarlos. ¿Qué quieren fomentar en sus hijos? ¿Amabilidad, obediencia, amistad, tolerancia, bondad, perseverancia, solidaridad, honestidad, generosidad, gratitud, confianza , colaboración, responsabilidad, compasión, organización, paciencia, optimismo, caridad, perdón, puntualidad, coraje?…
• Escoja un valor a trabajar y establezca acciones concretas para fomentarlo.
• Aproveche las oportunidades cotidianas para estimular los valores. Llame a los valores por su nombre. Por ejemplo: «el vecino fue muy amable y colaborador, al ayudarnos esta mañana»
• Lea cuentos con valores que les ayude a comprender mejor el concepto
• Practique el valor en familia
• Rechace cuando se exprese en cualquier medio una conducta incorrecta y elogie las adecuadas

 

La semana recién pasada se le llamó la semana de valores en el colegio pues se hicieron varias actividades relacionadas con la cooperación, el respeto mutuo,el respeto al medio ambiente, la solidaridad. Hubo conferencias, salidas pedagógicas, actividades de juego, etc. todas orientadas a desarrollar valores de convivencia. Por ejemplo, el sexto grado colaboró para que fuera posible una actividad artística con niños de escuelas públicas en el MUNA y el séptimo grado realizó talleres de trabajo de equipo a través de juegos.

Educar en valores nos humaniza.  Antonio Pérez Esclarín,  pedagogo español-venezolano, dice que los padres somos arquitectos de personas, no de máquinas, no de cerebros, de personas.

Pero ¿qué valores quisiéramos educar en nuestros hijos que permitan la convivencia, que permitan la humanización?  nos imaginamos que se les vienen palabras tales como respeto, solidaridad, cooperación, altruismo, paz.

Imposible dejar de mencionar que lo primero para educar en valores es EL EJEMPLO. En el siguiente artículo se explica cómo el respeto se gana respetando:  ¿por qué hay que evitar gritarle a nuestros hijos?

Por otro lado, dice el dicho que «la práctica hace al maestro»: practicando los valores  diariamente se convertirán en  un estilo de vida.

Existen infinidad de recursos en los cuáles apoyarnos para educar en valores: cuentos, libros, juegos,etc.

Este enlace los llevará a ver un poco de lo que pueden echar mano:

https://www.youtube.com/watch?v=d8kYOZDjaMw